La colección se inspira en el suelo recuperado de una antigua casa de campo romana, que se remonta a principios de 1900, cuando el cemento comenzó a usarse como aglomerante para trabajos de renovación, junto con piezas de mármol o materiales reciclados como inserciones. En el gres porcelánico de I Cocci, el grano varía según el tamaño de las diferentes piezas obtenidas de un solo tipo de chips de mármol blanco tradicional y cotto blanco. El mortero utilizado es gris en el exterior y blanco en en núcleo. La colección presenta un azulejo con el mismo patrón grava presente como elemento decorativo.